lunes, 26 de enero de 2015

Maletas...

   Señores, tengo una duda.
Que no es una duda de estas tipo "vivo sin vivir en mí y sin vivir vivo", no. Bueno más que una duda es algo que no entiendo.
   Verán, es que he ido con mi amiga A a comprar una maleta, porque resulta que se va a NY. Comprenderán que el tener que ir a verla se ha convertido en algo que un día pasará porque es necesario que vaya a NY, todos lo sabemos. El caso es que me dijo eso, que tenía que comprar una maleta y decidí acompañarla.
Y lo que no entiendo es esto.
   Quién determina el tamaño de las maletas?. Quién ha sido el inconsciente?.
Yo se lo voy a decir. Un señor. Ha sido un señor.
Porque de haber sido una señora la que determinase el tamaño, eso no sería así.
   Y cuidado, que no lo digo por ofenderles caballeros, ni mucho menos. Pero explíquenme qué significa eso de "bolsa de fin de semana" o "maleta de cabina".
Eso no es un concepto. Es una mentira.
Qué cabe ahí?, nada.
Una vez compré una bolsa de esas llamadas, "de fin de semana", o así fue al menos como la llamó la dependienta, que eso no era bolsa ni era nada...


...eso es un bolso grande y si me estiran mucho, un bolso para pasar la noche, pero de fin de semana?, pues una de dos, o van a llevar todo el fin de semana la misma ropa o va a ser un fin de semana muy corto...
Ante esta inexistencia de bolsa de fin de semana, me dije, pues cómprate una maleta de cabina.
Otra mentira.
Porqué las llaman maletas si son las bolsas de fin de semana rígidas?.
   Son maletas para "llevar lo justo", dijo la dependienta.
Hombre y tan justo. Tan justo que no pretendas cambiar de zapatos porque no van a caber.
Y servidora, "pero esto es para fin de semana no?". Y la dependienta un tanto desconcertada..."bueno, para fin de semana o para el tiempo que necesite"...
No, para el tiempo que necesite no. Yo no puedo irme una semana con una maleta de cabina.
"Estas maletas no se facturan", dijo sonriendo mientras asentía.
Pero claro que no se facturan. Cómo se va a facturar si no hay nada que guardar ahí?...O sea, qué tengo que meter ahí?, si no cabe nada...
Y luego otra cosa, donde vaya no puedo comprar nada, porque o lo traes puesto o a ver dónde lo metes.
Y ustedes dirán, cómo sabe que no cabe nada?...por favor...igual que sé cuando voy a las tiendas que no hay nada...uno abre la maleta y LO SABE. Entonces hay que recortar de la lista de cosas que una tenía planeado llevarse, lista que ya ha sido recortada con anterioridad, dejando en uno los cambios de vestuario por día.
Pero les diré que me llevé la maleta de fin de semana/maleta-de-cabina-que-no-se-factura porque me gustan los desafíos a la hora de hacer el equipaje y porque nunca se sabe...a lo mejor un día hace falta.
Un día que vayamos a hacer un viaje y tengamos que llevarla como maleta extra con los zapatos, quiero decir.
   Porque cuando vamos a hacer un viaje largo, hay que llevar la maleta grande. Eso es así.
Grande y en condiciones. Y cuando digo en condiciones me refiero a que no pese más de lo necesario, que sea ligera.
Sino les pasará como a mí cuando fui a mi adorada Roma.
Que yo no sabía lo del límite de peso, que son 23kg, y me dan una maleta que pesa mucho. Y así no. Porque así me recortan las cosas que puedo llevar. Y no se puede poner límites a los estilismos cuando uno va a Roma. Eso no se hace. Hay una ley no escrita que...(     )...eso no se hace...
Qué clase de equipaje voy a llevar si la maleta pesa 7 kilos?...
Aún le quedan 16, dirán ustedes...sí claro...metan un par de botas y veremos lo que queda...
Así pasa lo que pasa...que una se ve forzada a depositar en la maleta de su acompañante cosas que no caben en la suya.
   Y ya no hablo sólo de zapatos, sino de productos de tocador también.
En estos casos siempre sale el acompañante de turno diciendo que en el hotel hay champú y gel...y se lo digo porque a mí me ha pasado...además lo dice así como con desdén..."naaaaaaaaah...si en el hotel hay champú y gel..."...
Mira a ver qué champú. Otra mentira. Eso no es champú. Es una muestra de cortesía.
   Es por esto que yo estoy muy de acuerdo con los señores que dicen que con media maleta tienen suficiente. Les aplaudo la iniciativa, es más, les insto a ello. Porque eso significa que media maleta suya es nuestra.
Y es que siempre lo digo, con dos que se quieran uno que comparta maleta es suficiente. Y oigan, que tampoco hace falta que se quieran, porque el hecho de ceder media maleta ya es un gesto de cariño hacia la otra persona...qué bonito es eso de compartir...
Y ahora les dejo, que tengo que recoger una cosa...


   "Este tamaño está bien?"...
   "Son perfectas".



(26-01-15)

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