lunes, 14 de julio de 2014

Vacaciones...

   Queridos amigos, como todos los años por estas fechas, "Fueron felices y comieron tortellini" hace un paréntesis y se toma un descanso.
Ciertamente no donde una quisiera, (en la tierra de los tortellini), pero al fin y al cabo, un descanso siempre viene bien...(a ver si un año de estos aprendo a descansar)...
   Llegan días de sombreros para mitigar los rayos del sol, que bajo una alta protección, dejaremos que nos acaricien un poco la piel para tornarla algo morena, un poco más de lo normal. Días de relajarnos y leer aquellos libros que no hemos tenido tiempo de leer, en el formato que sea, de dejar que la sal del mar nos deje su olor y su sabor en la piel. De nadar lo largo de la piscina a la ida, y bucear la vuelta.
De días más largos que a veces se pueden hacer muy cortos si estamos en buena compañía.
Días de hacer castillos de arena...

 ...y sonreír satisfechos pensando, ni  Frank Gehry, mientras contemplamos nuestra gran obra efímera.
Días de bikini, cervecitas heladas, de apartar el agua porque está fría, de salpicarte y gritar que tú no lo hagas, de tirarnos de cabeza, de bomba, dando un grito...y de paso también en el agua...de jugar como niños de treinta y...
   Disfruten de estos días.
Hagan lo posible por pasarlo bien...
Yo les espero a la vuelta...y espero poder contarles muchas cosas...
Besos a todos...feliz verano.



Ilustración, Jordi Labanda
(08-07-14)

viernes, 11 de julio de 2014

Las cremas y los solares...

   Señores, mi vida es un drama.
Sí. Hacía mucho que no se lo decía.
Aaaaay...si no es suficiente con el calor que hace, se me ha terminado la crema hidratante.
   Y ustedes dirán, y su vida es un drama porque se le ha acabado la crema hidratante?. Pues claro que no. Pero qué se creen?. Mi vida es un drama porque he ido a comprar una nueva y ha pasado.
Me han vendido una crema hidratante "primeros signos de la edad".
Y un serum.
Lo ven?, drama.
Sí...es que soy fácil. O sea, fácil para lo de las cremas. Bueno para lo demás también...bueno depende. Bueno olvídenlo.
   Pero lo peor de lo peor, ha sido cuando la dependienta me ha dicho, "...te interesa esta, porque ya tenemos una edad...".
Una edad señores. Se dan cuenta no?, una edad.
Una edad tendrá ella. Yo tengo treinta y...(             )...(bueno, de eso no estamos hablando ahora).
Porqué me incluye cuando para llegar a su piel hay que pasar por una capa de maquillaje?. (Sonido de chasquido de lengua). Perdón, no era una...
Eran tres.
Y yo anonadada como estaba, de manera temporal, sólo he oído a mi amiga cuando después del comentario, por lo bajo ha dicho un "...se va a liar..."...
   Y la mujer ahí en su monólogo y gesticulando, que más bien parecía que estaba en el club de la comedia.
Y cuál es la diferencia entre esta y esta otra?...le digo.
Huy no, tú has de quedarte una de las dos rosas, me dice, porque esa es una hidratante reparadora...y aún no estamos en ese punto.
Y mi amiga de nuevo, "...vaya tela..."...
   Que yo les digo algo, ahí sólo había una crema rosa. La otra era roja. Si no sabemos diferenciar entre rojo y rosa vamos muy mal.
Es como cuando los hombres se creen que sólo hay dos azules, el claro y el marino, que es el oscuro.
Así que he cogido la rosa y al leer las propiedades he tenido que alejar la caja.
   Y la mujer, necesitas algo más? y yo pensando, sí, que los textos de las cajas sean más grandes, porque ahora voy a tener que comprar un hidratante contorno de ojos.
Y medio cantando, solares?
Porqué las personas preguntan y no dan tiempo a contestar?. Entre esas y las que les preguntas y no te contestan, el mundo está muy mal.


   Los solares merecen un punto y aparte.
Los solares son otro mundo.
Hay tantos. Y tantas marcas. Que una siempre acaba cogiendo el que compró el año pasado porque le fue bien.
Yo suelo comprarlos en función de como me encuentre ese día, aunque es cierto que si el del año pasado me fue bien, lo compro de nuevo. Y ustedes dirán, y qué manera de comprar es esa?...pues la mía. No digo que sea la correcta, digo que es la mía. A ver, cuestiono yo la suya?...Digo yo algo sobre si compran los lácteos con bífidus o sin él?
   A lo que iba, que hay muchas cosas que comprar en este apartado. Claro, así una luego va a la playa y necesita la gran bolsa...
Cómo dicen?, que el protector solar y ya está?... :-) ...que inconscientes...
Los productos a comprar son...
   Bronceador. Que a su vez está dividido en aceite, spray solar hidratante, spray solar protege y broncea, leche solar protege y broncea, leche solar hidratante, leche solar rápida absorción, crema solar anti envejecimiento y...spray solar protege y refresca.
Eso son sólo los bronceadores. Luego hay que comprar un after sun.
Normalmente la elección va en función de lo que le guste pringarse a cada uno.
A mí por ejemplo, me gusta pringarme poco, ya lo saben. No. Porque una va a la playa, coge el spray que protege y refresca, (que ya sacó Clinique hace años, pero como ahora no podemos comprarlo, compraremos el...el de la versión económica), se pulveriza a sí misma y no ensucia.
Esto del spray ha sido un avance. Sí...Ahora ya no vas a la playa con la crema, que te pones en la mano y como te has puesto mucha peeem, pegote en la toalla.
Pegote en la toalla que dices, aaay que me ha caído. Y lo quieres recoger con la otra mano que no sabes cómo pero está llena de arena, igual que cualquier toalla que no sea la mía. El tapón va por ahí perdido, probablemente también lleno de arena y al final, uno que no sabe qué hacer con la crema que tiene en la mano se la va untando por todo el cuerpo y la cara, con la arena de la mano libre.
Mal.
Así no se hace.
Es que no ven que hay una crema específica para la cara y que los comercios venden exfoliantes?. No quieran exfoliarse con arena de playa...no es suya la arena, es de todos.
Por eso lo del spray es muy cómodo. Yo estoy a favor totalmente. De hecho estoy totalmente a favor de todo lo que no pringue...(       )...bueno, siempre se puede hacer alguna excepción, tampoco quiero que piensen que soy una maniática del...una maniática.
Es que claro, esto antes no era así.
Antes cuando yo tenía diez años o menos, una llegaba a la playa y si te ponías la crema bien y si no, pues luego...naaaaah...así estaba yo, que parecía un conguito. Ahora no. Ahora no parezco un conguito, digo.
   Entonces usted no va a la playa por si se llena de arena, dirán. No. Yo sí voy a la playa. Pero es que cuando voy, mi toalla no tiene arena!!!. Y ya llego con el protector puesto. (          )...el solar...qué protector iba a llevar si en el agua no...déjenlo...
Y, y, les voy a decir más, miren si hemos avanzado en cuanto a bronceadores se refiere, que ahora han sacado uno, que se llama bruma seca, sí, el anuncio dice, "...adiós a la arena pegada en tu piel". Y no lo ha hecho ningún amigo mío ni nada...quiero decir, hay más personas histéricas de la arena como yo y para ese colectivo han sacado esto.
   Y dicho esto les dejo, me voy a por la bruma seca que he quedado con mi mejor amigo para ir a la playa.
Pues no me dice "...sabes qué sería divertido?, salir del agua y rebozarte en la arena como una croqueta jajaja, estarías muy graciosa..."...
Lo dicho, que me voy a por la bruma seca y a pasar por alto el comentario de mi amigo...si es que...




Ilustración, Jordi Labanda
(11-07-14)

jueves, 10 de julio de 2014

Querida amiga

   Querida amiga, he pensado que esta sería una buena manera de decirte gracias.
Gracias porqué?...
Gracias por un montón de cosas. Las pasadas, las presentes y las futuras.
Gracias por estar a mi lado, por saber por mi tono de voz cómo me siento. Por aguantar mis días buenos, los regulares y los malos.
Por escuchar una y otra vez las historias que te cuento.
   Por ser mi compañera de batalla. Por trazar planes a mi lado, estrategias para llegar a la meta.
Gracias por decirme las cosas y recordarme después que tú ya las veías venir...(suelen cumplirse todas las que ves venir?...)... :P
Por tus intervenciones sutiles.
Por tener la paciencia que tienes.
Por estar a mi lado en los momentos difíciles...y seguir ahí.
Por todo eso, querida amiga, sólo puedo decirte gracias.
Por estar y por ser.


Ilustración, Jordi Labanda.