jueves, 4 de diciembre de 2014

De compras...

   Señores, qué fatalidad...
Acabo de volver del centro...que bueno, no se pueden imaginar la de gente que había...pero porqué?...pero porqué no me dejan hacer mis gestiones con calma?.
Es que luego dicen, uy que te quejas de todo...y no es así...no me quejo de todo...pero es que me agobian...y ahora dirán, es que te agobias enseguida...pues sí...eso no lo voy a discutir...pero tengan en cuenta que yo no soy...es que las personas no se ponen en mi pellejo...no...vale soy yo.
   Resulta que, por si aún no lo saben, se acerca la navidad. La real digo. Porque navidad en los centros comerciales es desde noviembre.
El caso es que yo tenía que hacer unas gestiones, que siempre queda más mejor que decir que tenía que hacer unos recados y allí me fui. Al triangulito.
   Perdón, antes de eso fuimos a buscar unos calcetines, no quiero aburrirles con detalles, resulta que tengo unas botas altas que me compré el año pasado en Uterqüe y la parte del final del cierre de la cremallera me roza, entonces cuando llevo medias las rompe y dije, voy a comprar un calcetín alto, me lo pongo debajo, o sea encima de la media y así ya no roza.
El caso es que me voy a una tienda y no habían. Lo ven no?, o sea yo voy con toda mi buena intención y los contratiempos me surgen así, tan tranquilamente.
Sshhhhttt...no pasa nada, ahora vamos a otra tienda, otra tienda y ya en la tercera digo, chica, no puede ser tan complicado encontrar unos calcetines hasta la rodilla granates y que no parezcan de uniforme de colegio, que tengan un poquito de "fantasía"...(y me dice D, tú si que tienes fantasía...)...se dan cuenta no?...lo que yo les diga...tiene una chispa...
(Es que claro, esto los hombres no lo entienden, pero un calcetín cualquiera NO sirve. Eso es así. Y todas lo sabemos. Porque el de la primera tienda tenía como un trenzado y yo lo quería así. De verdad, no es tan complicado, es que luego me hacen quedar como una maniática...)...
Encuentro el calcetín trenzado, no había mi talla. No pasa nada, porque aunque no lo parezca soy una persona que sabe buscar otras soluciones...(ooooooooooooooj de verdad que no es tan complicado, es que todo me tiene que pasar a mi?????...)...al final me llevé un pack de dos, unos granates y unos gris claro, como si fueran de angora. Perfectos.
   De ahí al triangulito.
Que ya que estábamos, dije, pues vamos a la boutique Nespresso, compro unas cajitas y aprovecho el viaje. La tienda/boutique vacía. El chico dependiente amablemente me pregunta si quiero llevarme un tubo nuevo de chocolate o avellana y le digo que no puedo tomar ambos porque soy alérgica. Nos invitan a un café, quien dice uno dice tres, porque éramos tres, me vuelve a preguntar si lo quiero de chocolate o avellana... O_o ...(eso, luego que no se diga que no escuchan eeeeeh?)...le repito que no, que tengo alérgia y me prepara uno de vainilla.
Oigan, eso quemaba más que el infierno. Que mal...y yo ahí esperando...
Miren que me molesta que me miren mientras trato de comer/beber, pues la tienda/boutique se empezó a llenar, la gente en la cola como se aburre te mira, tú te pones nerviosa, te quieres tomar el café pero no puedes porque ha venido el diablo, ha dejado el traje de Prada se ha vestido de dependiente y te ha hecho una café...(que digo yo algo, si resulta que le he vendido el alma por el café, me habría pedido un volluto que me gusta más)...
Yo no podía tomarme el café señores, no podía. Y D que si quería cambiarlo de taza...y lo cambié de taza para ver si se enfriaba...sí...un enfriar...y yo así no puedo. Porque si la gente me mira no puedo. Así que hice lo que tenía que hacer, me tomé el café de un traguito, sí, yo todo a poquitos y me marché. 
Me marché llorando y quemándome por dentro...y D, vamos? y yo, dode...porque no tenía ni lengua ni nada parecido, aquello era como un trozo de corcho...mmmm...nunca más voy a saber el gusto de las cosas porque se me han muerto las papilas gustativas...menos mal que no soy de queja fácil...menos mal...
   El caso que subimos, una planta, otra planta...y llegamos a la juguetería. 
Que desmadre...Oigan, muy fatal. Pero mucho eh?.
Y yo en mi línea. Que quería un Mr. Potato, pues no había. Lo ven no?, llego a ir al mar y no hay agua.
Unos empujones en las colas. Pero porqué la gente empuja?...que no te van a atender antes...que primero está este señor y luego yo y ni el señor ni yo vamos a permitirlo que llevamos aquí diez minutos...
En estos casos, siempre llega una señora por el lateral, con la pretensión de colarse, todo el mundo la mira muy mal y después mira muy mal a la dependienta no vaya a ser que le cobre antes.
Aquí la dependienta estuvo muy rápida, porque le dijo a la señora, póngase en la cola y cuando le toque nos dice lo que quiere y la acompañaremos.
Señores...yo no sabía si aplaudir o hacerle la ola o todo a la vez...
(Y ustedes dirán que es lo más normal del mundo, pero yo que llevo trabajando desde siempre cara al público les digo que no lo es).
Y la señora de delante nuestro, "empaquétalo bonito eh?, con papel bonito". Yo de verdad que esto no lo comprendo. Porque como también me ha sucedido...
El papel es el que hay, bonito o feo no hay otro. Es ese. No se puede hacer más.
Y la señora, "y me pondrás un arbolito de esos de navidad no?"...
Un arbolito de navidad?...quiere un bonsai y llenarlo de espumillón o que? Que lo que pone el triangulito es un muérdago de plástico...que tampoco es como para poner en un brete a la chica que está diciendo que aún no tiene...que digo yo algo, que el chino de mi barrio, el chino Juan, él tiene. Y tiene de plástico como una rama y de verdad. Se lo voy a decir a la señora...porque luego sucede lo que me sucedió a mí una vez que una mujer me dijo que ella sabía que yo tenía "ramitas de esa con piñas" pero que me las guardaba para mí.

Sí...iba a hacer un centro de mesa en casa...En fin...
   El caso es que después de nuestra gran hazaña y llevar más paquetes de los que tres personas pueden llevar, D tuvo la brillante idea de coger el autobús.
Y ustedes digan lo que quieran, pero autobús y un montón de paquetes es un no muy grande.
Y yo que si va muy lleno cogemos otro pero claro, saben lo que pasa?, que a mí no me hacen caso. Debe ser porque soy tamaño encantador, creen que quepo en cualquier hueco de un autobús lleno de personas.
Que horrror.
Que mal señores. Hay algo peor que un transporte público lleno de gente?, sí. Un transporte público lleno de gente, que una vaya llena de paquetes y que todas las ventanas estén cerradas. Bueno, parecía que estábamos precintados...que angustia, que olor a "el autobús no puede llevar a más gente pero aún dejaremos que suba alguien más", que yo les digo algo...alguien estaba consumiendo su oxígeno y el mío también. Encima no es por quejarme pero tuve que ponerme en medio de dos asientos, que yo decía, como frene y me caiga, me siento encima de este señor y no es mi tipo.
Esto a los demás les hizo mucha gracia...yo no se la veía por ninguna parte...llega nuestra parada, muy a mi pesar me suelto para ir hacia la puerta y no me dejan. Drama, drama, drama.
Ahí estaba yo, en mitad del autobús cogida a ninguna parte, suelta a mi suerte, a expensas de que el conductor no diera volantazo ni frenazo porque sino me mataba allí.
Así que hice lo que tenía que hacer, cogerme de D. Y es que en momentos así hay que sacar siempre la solidaridad de donde sea...y el...si me caigo yo, tú vas detrás.
   Nada más llegar a casa, compruebo que todo está bien y...y me he equivocado en una cosa!!!...ahora me toca volver para cambiarlo!!! Ooooooooj lo ven?, es que todo me tiene que pasar a mí!!!???...




(04-12-14)
Ilustración Jordi Labanda


2 comentarios:

  1. Ahora es horrible ir de compras esta todo lleno de gente a mi me agobia un montón!!besos

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    1. A mí también la verdad, pero cuando no queda más remedio....grrrr...jajaja, un besote!!!

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