Señores, ya está aquí la primavera.
Esa estación del año tan bonita...(no porque sea mi cumpleaños, que también, sino porque es una de mis preferidas)..., empieza el calor, se acaban las rebajas, comienza la nueva temporada, llegan las alergias...qué bonito es lo de las alergias...
Ustedes tienen alguna?, yo no puedo respirar, en ocasiones me pican los ojos y se me ponen rojos...en fin...todo muy apropiado a esta época del año. Menos mal que esto es sólo en primavera...el resto de alergias como ya las tengo todo el año...ya una se acostumbra.
Este año ha llegado como siempre, el día que toca. Para el triangulito ha llegado más tarde, y esto me desconcierta.
Porque claro, cuando llegaba el principio de marzo, llegaba la primavera, a El Corte Inglés. Pero ahora no, ahora lo han retrasado. Y no nos engañemos, la primavera llega cuando lo dice el triangulito. Sí, sí, lo que ustedes digan, pero así es.
Estaba el otro día en mi querido Lola&lo, con mi amiga M y hablábamos de ello con H, "no, no, aún no es primavera en el triangulito, ahora es la semana fantástica".
Y claro, como una está desconcertada, porque cree que es primavera, pero aún no lo es, pues sufre un pequeño ataque de...primavera anticipada. Sí. Así de repente, escuchando una canción, me di cuenta de que quería a todo el mundo.
Vale, quería a ciertos mundos más que a otros. El caso es que me vino una espontánea oleada de cariño. De cariño y de ñoñería.
"Eso es que estás "en uno de esos días"", me dijo mi amigo R. Yo lo miré muy seria y sin decir nada. (Que como saben, es mucho peor que hablar).
Hay algo que pueda odiar más que la frase, "estás en uno de esos días"?...Ay sí...que aprieten el tubo de la pasta de dientes por la mitad.
Perdón, que nos vamos de tema...La culpa es de la primavera, que está ahí, a la vuelta de la esquina... Aaaaay que la giramos...
Llega la primavera y ya saben lo que pasa....sí, ya sé lo que estarán pensando, ese dicho tan gracioso que reza, "la primavera la sangre altera"...pues no, pasa que nos volvemos tontos...(tranquilos, es culpa de la primavera...( )...normalmente).
No, por si lo están pensando, normalmente yo suelo ser tonta todo el año. Sí. A mi para la tontería no me condiciona una estación...hasta ahí podíamos llegar...
Se ha catalogado este hecho, porque el ser humano dice que no, pero le encanta poner etiquetas a todo.
La "astenia primaveral" es el nombre que justifica estos cambios en el humor, la fatiga física y mental... (Aunque también tengo que decirles, que para fatigarme mentalmente en ciertos momentos, no necesito que sea primavera)...
Y así se lo dije a mi amigo, para que le quedase claro que no es que estuviera "en uno de esos días" y que esos síntomas estaban catalogados...já!. "...pues no es eso que tú dices, resulta que es astenia primaveral y además, a ti no te quiero ya". "Ah, que antes me querías?". "Que me dejes."
El ser humano. Que en ocasiones pregunta cosas que ni quiere, ni necesita saber.
El caso es, como les decía, que como ahora me encuentro en esta situación de vulnerabilidad, me ha dado por oír música...pero música tipo drama. De esta que te toca de cerca, o como dice mi amiga T, que te toca aquí...(y se señala el corazón)...en la patata...
Para hacer una comprobación de la realidad que me rodeaba, y buscando no ser la única con esa astenia, llamé a mi amiga E.
"Cariii...ay...fíjate que me ha dado por ponerme a oír música...y que te quiero mucho...Ay que haría yo sin ti... La verdad es que quiero mucho a todo el mundo. Bueno...a todo el mundo mundial no...pero aaaaaiiiinnns..."...Verán que me explico con una claridad meridiana...
Pero E, alias Cari, versada en mil diálogos, me entiende a la perfección.
"Ay cari, yo también te quiero mucho y tampoco sé qué haría sin ti...ya sé lo que me quieres decir, ya...como te entiendo...aaaaaiiiinnnssss"...
"Aaaaaiiiiinnnssss", una nueva forma de expresión que engloba taaaaantos significados...
Ven?...estas son las cosas que no vienen bien de la primavera.
Una vez se han pasado estos días, viene lo divertido. Claaaaaro...el ir de compras.
Esto a los señores no les pasa...ni les pasa, ni les suele parecer divertido. Y tú toda emocionada..."Nene/Cari/comoustedesllamenasupareja...este año se lleva el verde agua" y mientras una lo dice, mentalmente está haciendo un listado de las cosas que va a necesitar de ese color, como por ejemplo, unas Converse.
Y el nene/cari/comoustedesllamenasupareja las mira pasmado. No porque esté pensando la tarde que le espera de compras, no...es que no sabe de qué color le están hablando.
"Verde agua?, pero si el agua no tiene color...no?...yo tengo un polo azul marino que me vale para todo...y uno verde oscuro que...", "es verde musgo", dicen ustedes, aclarándoselo.
"Es que no lo entiendo, dicen algunos amigos míos, yo tengo cinco o seis polos y con eso y las camisetas voy tirando, pero es que vosotras cuando llega la primavera, a comprar ropa nueva, que la del año pasado no sirve"...
La del año pasado SÍ que sirve. Pero hay que tener ropa de refuerzo a la del año pasado...
Y nuevamente una se ve en la obligación de mirar muy seria desde la otra parte del probado y sin decir nada...porqué quieren entender algo que no van a entender?.
"Eso ahora da igual, me hace gorda el vaquero?"...
Y entonces se para el mundo, sale también la del probador de al lado, tu amigo mira al amigo de la chica del probador de al lado, que a su vez, mira a tu amigo con cara de..."a ver lo que vas a decir"...
"Entonces ese es el verde agua?...pues necesitarás unas Converse, no?"...
MAL.
No señores, así no. Primero porque no queda bien llevar las Converse y el vaquero del mismo color, así no destacan ninguno y después porque no. No, porque no ha respondido a la pregunta...entonces a una, que está muy sensible porque es primavera, esa respuesta no le es válida. (Sé de sobra que están pensando que en ocasiones ninguna respuesta nos es válida, pero de eso no estamos hablando ahora).
"O sea que me hace gorda".
El amigo de la chica de al lado, mira al nuestro, no le dice nada, pero mentalmente le acompaña en el sentimiento.
Y nuestro amigo disculpandose de mil maneras..Pero eso da igual también, porque la chica del probador de al lado, TAMBIÉN lleva el vaquero verde agua y de inmediato se pone en nuestro lugar!!!...
"A mi me ha pasado lo mismo, no te preocupes. Te queda perfecto, llévatelo...".
El propio amigo y el ajeno se miran levantando los hombros y mientras nos vamos, oigo que uno le dice al otro...
"...creo que es por la primavera..."
(26.03.13)
martes, 26 de marzo de 2013
miércoles, 20 de marzo de 2013
La paella...
Señores, ayer terminaron las fiestas de mi ciudad. Algunos dirán que por fin, otros que es una lástima. Yo no voy a decir nada, que luego todo se sabe.
El caso es que como ya les dije en mi anterior post, titulado "Valencia en fallas", hace dos noches, cumpliendo la tradición, hicimos una paella.
Sí, hicimos.
Aunque no, yo no la hice, pero ahí estaba, así que como me encontraba "en el ajo", me incluyo. No, yo no la hice, porque el propósito de hacer la paella es comer después. Y en una noche de fallas, no estamos para experimentar. Que les digo una cosa, el día que me lo proponga, hago yo una...sólo tengo que proponérmelo firmemente...
El caso es que una llega, a la falla en cuestión y no encuentra a nadie. Y ustedes saben la cantidad de personas que se concentran en mi ciudad?, cómo iba a explicarles a todos que no me tocasen?...imposible...y encima no encontraba a los mios...ya tenía razón mi madre cuando me dijo si me hacía un bocadillo...me veía ya sin cenar paella y sóla, aun estando rodeada de gente.
Pero nuevamente y como en la mayoría de los casos, una se recompone, no pasa nada, voy a encontrarlos, ahora los busco y si no saco el móvil y...aaaaaaaay pero que no me empujéiss!!!...ay, ahí están...
Cuando una llega, la paella ya está en marcha. La miro fijamente, tomando distancia, a ver si puedo hacer algo. Evaluada la situación y como la paella no me transmite ningún tipo de señal, ni nadie me da instrucciones, decido que lo mejor será que me tome una coca cola...(sin cafeína?...qué mentira es esta?)...bueno, me digo, voy a aportar mi grano de arena...(o más bien, mi grano de arroz)...
"Eeeeeh...pues va bien, no?", "falta agua", me dicen. "Ah sí, pues toma esta no?", "nooo, esa no es la que hemos usado antes, el agua no se puede mezclar"...( )..."claro", respondo preguntándome porqué, si el agua es agua. Menos la Pellegrino y Evian, como todos ustedes saben, y si no lo sabían, ahora ya conocen el dato.
Ustedes ven?,yo quise ayudar, pero no me dejaron...
Previamente a echar la verdura, hubo que ir a casa a recogerla, puesto que la encargada de tal menester, se olvidó de ella.
Entonces pasan un montón de personas, que van aportando, también, su opinión...que si falta agua, que si faltan 20 minutos, que si yo quiero probarla...y Mj poniendo precio a las consumiciones...que si son cinco euros que estamos en crisis y si siguen preguntando subirá a seis.
Llega el momento, después de poner la verdura, el pollo, el azafrán y el pimiento colorado, de que se eche el arroz... El arroz...que no tenemos. (Para que vean que las calamidades no son sólo cosa mía).
"No hay arroz?"...( )(planta rodadora del desierto)...
Menos mal que estamos preparados para este tipo de contratiempos, y alguien pudo ir corriendo a comprarlo...sino...verdura y pollo en paella...pero de paella nada...
Y una de un lado para otro, con su coca cola de mentira, perdón, sin cafeína...intentando colaborar a su manera..."Y ahora cuánto hay que esperar?", "unos veinte minutos"...
Oigan...cada uno colabora como puede...o como mejor le viene...
Y yo, valorando la situación, el humo (que me perseguía), cómo me va a oler la ropa..., el tumulto pasajero, me di cuenta de que mi manera de colaborar, era no interferir.
No, no era la postura cómoda. Era la más sensata. Además, no me digan que no es absolutamente encantador ver a un hombre cocinar...No?...bueno, pues a mí sí que me lo parece. Un hombre que cocine a mí ya me tiene ganada. Bueno...no nos vayamos del tema...
Tras una pequeña comprobación del arroz, y varias opiniones de los allí presentes y los viandantes, "le sobra caldo", "le falta un poco más de cocción", "eso ya está"...yo sólo puedo preguntarme cómo van a quitar el caldo que sobra y sobretodo, dónde van a ponerlo?...
"Echa más leña al fuego, así consumirá el caldo", dice uno de nuestros amigos, que parece haber oído mis pensamientos...ustedes ven cuántas cosas se aprenden haciendo una paella?...interesante...
...una vez consumido el caldo sobrante y pasados los veinte minutos...la paella está lista.
Y ahora se da un hecho de estos "caseros"... Llega mi gran T.E. extiende unos periódicos en el suelo, coge con una cuchara un poquito de arroz, lo pone en los periódicos y ordena que la paella se coloque encima...para que no sepa a quemado!!!.
Yo sigo sorprendiéndome de algunas cosas, para que luego digan algunas personas que no se sorprenden de nada...pero cómo no voy a sorprenderme de este "remedio casero" que jamás en mi vida había oído?...
Después de un aplauso al cocinero y su pinche, y un reparto entre propios y extraños...la prueba final. Saber si la paella está tan buena como parece...
Les mentiría si les dijera que era tarde y tenía mucha hambre...porque ni era tarde, ni tenía mucha hambre. Pero me comí el plato entero...porque estaba ESPECTACULAAAAAR!!!.
Y una vez más, el equilibrio queda restablecido...unos hacen el esfuerzo de cocinar...y yo hago el esfuerzo de comerme lo del plato... ;-)
(Si en el fondo me adoran...besitos de parte de...R).
(20.03.13)
El caso es que como ya les dije en mi anterior post, titulado "Valencia en fallas", hace dos noches, cumpliendo la tradición, hicimos una paella.
Sí, hicimos.
Aunque no, yo no la hice, pero ahí estaba, así que como me encontraba "en el ajo", me incluyo. No, yo no la hice, porque el propósito de hacer la paella es comer después. Y en una noche de fallas, no estamos para experimentar. Que les digo una cosa, el día que me lo proponga, hago yo una...sólo tengo que proponérmelo firmemente...
El caso es que una llega, a la falla en cuestión y no encuentra a nadie. Y ustedes saben la cantidad de personas que se concentran en mi ciudad?, cómo iba a explicarles a todos que no me tocasen?...imposible...y encima no encontraba a los mios...ya tenía razón mi madre cuando me dijo si me hacía un bocadillo...me veía ya sin cenar paella y sóla, aun estando rodeada de gente.
Pero nuevamente y como en la mayoría de los casos, una se recompone, no pasa nada, voy a encontrarlos, ahora los busco y si no saco el móvil y...aaaaaaaay pero que no me empujéiss!!!...ay, ahí están...
Cuando una llega, la paella ya está en marcha. La miro fijamente, tomando distancia, a ver si puedo hacer algo. Evaluada la situación y como la paella no me transmite ningún tipo de señal, ni nadie me da instrucciones, decido que lo mejor será que me tome una coca cola...(sin cafeína?...qué mentira es esta?)...bueno, me digo, voy a aportar mi grano de arena...(o más bien, mi grano de arroz)...
"Eeeeeh...pues va bien, no?", "falta agua", me dicen. "Ah sí, pues toma esta no?", "nooo, esa no es la que hemos usado antes, el agua no se puede mezclar"...( )..."claro", respondo preguntándome porqué, si el agua es agua. Menos la Pellegrino y Evian, como todos ustedes saben, y si no lo sabían, ahora ya conocen el dato.
Ustedes ven?,yo quise ayudar, pero no me dejaron...
Previamente a echar la verdura, hubo que ir a casa a recogerla, puesto que la encargada de tal menester, se olvidó de ella.
Entonces pasan un montón de personas, que van aportando, también, su opinión...que si falta agua, que si faltan 20 minutos, que si yo quiero probarla...y Mj poniendo precio a las consumiciones...que si son cinco euros que estamos en crisis y si siguen preguntando subirá a seis.
Llega el momento, después de poner la verdura, el pollo, el azafrán y el pimiento colorado, de que se eche el arroz... El arroz...que no tenemos. (Para que vean que las calamidades no son sólo cosa mía).
"No hay arroz?"...( )(planta rodadora del desierto)...
Menos mal que estamos preparados para este tipo de contratiempos, y alguien pudo ir corriendo a comprarlo...sino...verdura y pollo en paella...pero de paella nada...
Y una de un lado para otro, con su coca cola de mentira, perdón, sin cafeína...intentando colaborar a su manera..."Y ahora cuánto hay que esperar?", "unos veinte minutos"...
Oigan...cada uno colabora como puede...o como mejor le viene...
Y yo, valorando la situación, el humo (que me perseguía), cómo me va a oler la ropa..., el tumulto pasajero, me di cuenta de que mi manera de colaborar, era no interferir.
No, no era la postura cómoda. Era la más sensata. Además, no me digan que no es absolutamente encantador ver a un hombre cocinar...No?...bueno, pues a mí sí que me lo parece. Un hombre que cocine a mí ya me tiene ganada. Bueno...no nos vayamos del tema...
Tras una pequeña comprobación del arroz, y varias opiniones de los allí presentes y los viandantes, "le sobra caldo", "le falta un poco más de cocción", "eso ya está"...yo sólo puedo preguntarme cómo van a quitar el caldo que sobra y sobretodo, dónde van a ponerlo?...
"Echa más leña al fuego, así consumirá el caldo", dice uno de nuestros amigos, que parece haber oído mis pensamientos...ustedes ven cuántas cosas se aprenden haciendo una paella?...interesante...
...una vez consumido el caldo sobrante y pasados los veinte minutos...la paella está lista.
Y ahora se da un hecho de estos "caseros"... Llega mi gran T.E. extiende unos periódicos en el suelo, coge con una cuchara un poquito de arroz, lo pone en los periódicos y ordena que la paella se coloque encima...para que no sepa a quemado!!!.
Yo sigo sorprendiéndome de algunas cosas, para que luego digan algunas personas que no se sorprenden de nada...pero cómo no voy a sorprenderme de este "remedio casero" que jamás en mi vida había oído?...
Después de un aplauso al cocinero y su pinche, y un reparto entre propios y extraños...la prueba final. Saber si la paella está tan buena como parece...
Les mentiría si les dijera que era tarde y tenía mucha hambre...porque ni era tarde, ni tenía mucha hambre. Pero me comí el plato entero...porque estaba ESPECTACULAAAAAR!!!.
Y una vez más, el equilibrio queda restablecido...unos hacen el esfuerzo de cocinar...y yo hago el esfuerzo de comerme lo del plato... ;-)
(Si en el fondo me adoran...besitos de parte de...R).
(20.03.13)
viernes, 15 de marzo de 2013
El libro de Grey...
Señores, soy un número más en la estadística.
He leído el libro de Grey. El primero.
Verán, todo empezó con una amiga, que me habló de él. Y de repente todas empezaron a hablar de lo mismo, acompañándolo de un, "oyoyoyoy". Yo el "oyoyoyoy", me lo reservo para cuando veo el anuncio de Dolce Gabbana Sport...por dior...oyoyoyoy, (sí, una es humana y sucumbe...la vida es así, yo no he inventado las reglas de los anuncios de perfumes).Y que si el libro te engancha, que es buenísimo, que me encanta, que yo quiero un Grey en mi vida...
Así que, hace poco, lo leí.
A decir verdad, me lo dejó mi amigo R. "Te lo paso por mail, en qué formato lo quieres?". "(Cara de asombro)...formato?...eeeeeh...cuántos formatos hay?", "te lo paso en pdf, sabes lo que es eso, no?","sí, pero no voy a explicártelo". Transacción realizada. "Dame tu mail". Sí, señores, R es un amigo con el que puedo estar hablando hasta las tantas, o que está todo el día sin hablarme y me da las buenas noches, pero no tiene mi mail porque..."mi mail es...", "es una broma, no?"...lo ven?, por eso no tenía mi mail.
Y sí, el libro me atrapó durante cinco días. Desde luego, y hablo a título personal, ni me encantó al acabarlo, ni me pareció buenísimo. Y he leído opiniones muy a su favor, pero bueno, la opinión es libre y todos tenemos una. Después está lo otro. Lo de querer un Sr. Grey en nuestras vidas.
Hombre...una ve a Matt Bomer (el que presuntamente encarnará al personaje en la futura película) y claro, sí, basándose en el físico, una dice, cómo no voy a querer un hombre así en mi vida?.
"X...me he leído el libro de Grey", "y qué has hecho Quelita?, jejeje"...Ö...(pero porqué tengo que haber hecho algo, y porqué se ríe después?)...tras aclararle que no he hecho nada, le explico que mi pregunta va dirigida a saber su impresión, en caso de que él también lo hubiese leído. "No lo he leído, tú también quieres un Grey en tu vida?".
Huuuuum...si yo quiero un Grey en mi vida es una pregunta que ha rondado en mi cabeza mientras he leído el libro, dado el éxito social que ha provocado y la cantidad de mujeres que afirman querer uno. El pensamiento se veía interrumpido para mandarle mensajes a R diciéndole, "la chica esta es tonta", "cuando uno se enamora se vuelve muy tonto"...
Basándome en la lectura del primer libro, puesto que no he leído los dos restantes, he estado valorándolo y no...no quiero un Sr. Grey en mi vida. (A lo mejor al acabar el tercero, voy y les digo que sí...)...
Ya que de entrada me pida que firme un contrato...me parece cuanto menos, extraño...y si después me enseña la habitación que le enseña a la protagonista...verdaderamente...por muy atractivo que me pareciese el plan...me quedo muerta de manera provisional. (Hablo por mi,...cada uno y el Sr. Grey, que hagan lo que quieran). Porque ya saben que no soy de imaginar catástrofes fácilmente, pero imaginen que una se encuentra ahí, atada de manos con un pañuelo de Burberry, y...(hombre pues claro que de Burberry, qué pensaban)...y, les decía, sucede "algo". Y una ahí atada... Y qué va a pasar?, dirán ustedes...pues no lo sé...pero y si pasa?...una vez leí un libro en el que ataban a una mujer a una cama y su marid...bueno, eso es otra historia
Les decía que no. No me apetece que me estiren del pelo, (y eso sería lo de menos), ni que me hagan daño físico...(tampoco psíquico). No, porque me conozco, y empezaría a enfadarme y a acumular el enfado...y cuando me dejase las manos libres, le soltaría un sopapo...
Y claro...eso sería peor. Porque le haría enfadar...y ya saben lo que pasa cuando se enfada el Sr. Grey...
(A mí estaría castigándome constantemente, porque siempre le pondría algún pero a todo... :P ...así que ahora que lo pienso...estaría encantado conmigo).
Que un señor que prácticamente no conozco, conozca cada uno de mis pasos, pues la verdad, no me viene bien. Y que me controle hasta la comida menos. Vale, que me controle todo. No, no me viene nada bien. También me desconcertarían sus carísimos regalos. Pero sobretodo, tener que hacer lo que él quiera, siempre. Porque yo puedo dejar que la otra persona tome el control a veces, pero siempre no.
No digo que no acepte regalos caros eh?, de hecho, si alguno de ustedes quiere regalarme algo caro, lo aceptaré con mucho gusto, si quieren ir a Louis Vuitton y regalarme un bolso, no sé...así de repente se me ocurre el Speedy 30 con estampado damier...yo estaría encantada de aceptarlo y luego está el plus de que los querría siempre. Aunque en realidad, acepto regalos de todo tipo...
A lo que íbamos, Matt. O sea, el Sr. Grey, o sea, el libro. Una, analítica como es, enseguida cae en la cuenta de que el "pobre" Sr. Grey, es una especie de hombre torturado por la vida, un pobre niño rico, que se ha visto en la obligación de llevar una máscara que le protege de todos y hacia todo. Pobre Christian...y embargadas por ese halo de protección natural, enseguida queremos "rescatarlo" de su propio mal.
A mí en esa situación me pasaría como a la Srta Steele... nada más verlo se me caería el teléfono, el bolso, la libreta...todo...y claro, seguramente, acabaría queriendo estar con él, pero...no sé si a cualquier precio.
Como imagino que la mayoría, (tú no M, que no te gusta leer libros de manifiesto éxito..."mi tesorooooo"...jajaja...es broma, los lees después...) habrán leído el libro, supongo que puedo preguntarles, ustedes querrían un Sr. Grey en su vida?
Y luego he pensado otra cosa. Ustedes quieren un Christian Grey?...o a Matt Bomer?...Claaaaaro...es que no es lo mismo...luego llega su Pedrito, les da un azote y le gritan a lo Penélope cuando le dio el Oscar... "Peeeeeeeedrooooo pero qué estás haciendo?!!!" Y Pedro desconcertado..."Uy...pues no sé...como el Grey ese del libro que estás leyendo...no?"...(Ay Pedrito...)...
Imagino que los dos siguientes libros, que no he leído aún, darán un giro inesperado a la historia y el Sr. Grey nos abrirá su corazón...enseñando que, efectivamente, además de todo...es humano. Y que la srta. Steele, curada de amor y espanto, puede con todo. (O esa es la película que yo he organizado...en realidad, no sé cómo sigue la historia, tengo que pedirle el libro a mi amigo R...). Pero no me lo deja...y tampoco me quiere decir como sigue..."ven y te lo doy, qué pasa, que no te fías de mi?"..."huuuuummm...no lo sé...no tendrás un pañuelo de Burberry, verdad?"...
Continuará...(cuando lea la segunda parte)...
Fotos: Matt Bomer
(15.03.13)
He leído el libro de Grey. El primero.
Verán, todo empezó con una amiga, que me habló de él. Y de repente todas empezaron a hablar de lo mismo, acompañándolo de un, "oyoyoyoy". Yo el "oyoyoyoy", me lo reservo para cuando veo el anuncio de Dolce Gabbana Sport...por dior...oyoyoyoy, (sí, una es humana y sucumbe...la vida es así, yo no he inventado las reglas de los anuncios de perfumes).Y que si el libro te engancha, que es buenísimo, que me encanta, que yo quiero un Grey en mi vida...
Así que, hace poco, lo leí.
A decir verdad, me lo dejó mi amigo R. "Te lo paso por mail, en qué formato lo quieres?". "(Cara de asombro)...formato?...eeeeeh...cuántos formatos hay?", "te lo paso en pdf, sabes lo que es eso, no?","sí, pero no voy a explicártelo". Transacción realizada. "Dame tu mail". Sí, señores, R es un amigo con el que puedo estar hablando hasta las tantas, o que está todo el día sin hablarme y me da las buenas noches, pero no tiene mi mail porque..."mi mail es...", "es una broma, no?"...lo ven?, por eso no tenía mi mail.
Y sí, el libro me atrapó durante cinco días. Desde luego, y hablo a título personal, ni me encantó al acabarlo, ni me pareció buenísimo. Y he leído opiniones muy a su favor, pero bueno, la opinión es libre y todos tenemos una. Después está lo otro. Lo de querer un Sr. Grey en nuestras vidas.
Hombre...una ve a Matt Bomer (el que presuntamente encarnará al personaje en la futura película) y claro, sí, basándose en el físico, una dice, cómo no voy a querer un hombre así en mi vida?.
"X...me he leído el libro de Grey", "y qué has hecho Quelita?, jejeje"...Ö...(pero porqué tengo que haber hecho algo, y porqué se ríe después?)...tras aclararle que no he hecho nada, le explico que mi pregunta va dirigida a saber su impresión, en caso de que él también lo hubiese leído. "No lo he leído, tú también quieres un Grey en tu vida?".
Huuuuum...si yo quiero un Grey en mi vida es una pregunta que ha rondado en mi cabeza mientras he leído el libro, dado el éxito social que ha provocado y la cantidad de mujeres que afirman querer uno. El pensamiento se veía interrumpido para mandarle mensajes a R diciéndole, "la chica esta es tonta", "cuando uno se enamora se vuelve muy tonto"...
Basándome en la lectura del primer libro, puesto que no he leído los dos restantes, he estado valorándolo y no...no quiero un Sr. Grey en mi vida. (A lo mejor al acabar el tercero, voy y les digo que sí...)...
Ya que de entrada me pida que firme un contrato...me parece cuanto menos, extraño...y si después me enseña la habitación que le enseña a la protagonista...verdaderamente...por muy atractivo que me pareciese el plan...me quedo muerta de manera provisional. (Hablo por mi,...cada uno y el Sr. Grey, que hagan lo que quieran). Porque ya saben que no soy de imaginar catástrofes fácilmente, pero imaginen que una se encuentra ahí, atada de manos con un pañuelo de Burberry, y...(hombre pues claro que de Burberry, qué pensaban)...y, les decía, sucede "algo". Y una ahí atada... Y qué va a pasar?, dirán ustedes...pues no lo sé...pero y si pasa?...una vez leí un libro en el que ataban a una mujer a una cama y su marid...bueno, eso es otra historia
Les decía que no. No me apetece que me estiren del pelo, (y eso sería lo de menos), ni que me hagan daño físico...(tampoco psíquico). No, porque me conozco, y empezaría a enfadarme y a acumular el enfado...y cuando me dejase las manos libres, le soltaría un sopapo...
Y claro...eso sería peor. Porque le haría enfadar...y ya saben lo que pasa cuando se enfada el Sr. Grey...
(A mí estaría castigándome constantemente, porque siempre le pondría algún pero a todo... :P ...así que ahora que lo pienso...estaría encantado conmigo).
Que un señor que prácticamente no conozco, conozca cada uno de mis pasos, pues la verdad, no me viene bien. Y que me controle hasta la comida menos. Vale, que me controle todo. No, no me viene nada bien. También me desconcertarían sus carísimos regalos. Pero sobretodo, tener que hacer lo que él quiera, siempre. Porque yo puedo dejar que la otra persona tome el control a veces, pero siempre no.
No digo que no acepte regalos caros eh?, de hecho, si alguno de ustedes quiere regalarme algo caro, lo aceptaré con mucho gusto, si quieren ir a Louis Vuitton y regalarme un bolso, no sé...así de repente se me ocurre el Speedy 30 con estampado damier...yo estaría encantada de aceptarlo y luego está el plus de que los querría siempre. Aunque en realidad, acepto regalos de todo tipo...
A lo que íbamos, Matt. O sea, el Sr. Grey, o sea, el libro. Una, analítica como es, enseguida cae en la cuenta de que el "pobre" Sr. Grey, es una especie de hombre torturado por la vida, un pobre niño rico, que se ha visto en la obligación de llevar una máscara que le protege de todos y hacia todo. Pobre Christian...y embargadas por ese halo de protección natural, enseguida queremos "rescatarlo" de su propio mal.
A mí en esa situación me pasaría como a la Srta Steele... nada más verlo se me caería el teléfono, el bolso, la libreta...todo...y claro, seguramente, acabaría queriendo estar con él, pero...no sé si a cualquier precio.
Como imagino que la mayoría, (tú no M, que no te gusta leer libros de manifiesto éxito..."mi tesorooooo"...jajaja...es broma, los lees después...) habrán leído el libro, supongo que puedo preguntarles, ustedes querrían un Sr. Grey en su vida?
Y luego he pensado otra cosa. Ustedes quieren un Christian Grey?...o a Matt Bomer?...Claaaaaro...es que no es lo mismo...luego llega su Pedrito, les da un azote y le gritan a lo Penélope cuando le dio el Oscar... "Peeeeeeeedrooooo pero qué estás haciendo?!!!" Y Pedro desconcertado..."Uy...pues no sé...como el Grey ese del libro que estás leyendo...no?"...(Ay Pedrito...)...
Imagino que los dos siguientes libros, que no he leído aún, darán un giro inesperado a la historia y el Sr. Grey nos abrirá su corazón...enseñando que, efectivamente, además de todo...es humano. Y que la srta. Steele, curada de amor y espanto, puede con todo. (O esa es la película que yo he organizado...en realidad, no sé cómo sigue la historia, tengo que pedirle el libro a mi amigo R...). Pero no me lo deja...y tampoco me quiere decir como sigue..."ven y te lo doy, qué pasa, que no te fías de mi?"..."huuuuummm...no lo sé...no tendrás un pañuelo de Burberry, verdad?"...
Continuará...(cuando lea la segunda parte)...
Fotos: Matt Bomer
(15.03.13)
jueves, 7 de marzo de 2013
Valencia en fallas...
Señores, en breve son las fiestas de mi ciudad.
Y ustedes dirán, qué bien verdad?, pues no.
Lo sé. Soy una mala ciudadana. Pero si no me quejo yo, quién lo hará?.
No me juzguen, cortan las calles, los niños de muchos años tiran petardos de madrugada y los de pocos por el día. Total, que es una sucesión de petardos a todas horas. (De los que hacen ruído, digo...(eeeeeeeeh...)...o sea, de los que explotan)...
No señores, no. Llegados a cierto día, uno se cansa de escuchar petardos, (del tipo que sean), a todas horas.Y sí, efectivamente, mi capacidad de aguante es directamente proporcional a...( )...vale, para esto no tengo capacidad de aguante. A lo mejor es que me estoy haciendo mayor...( )...bueno, no, seguramente será otra cosa.
Para los que no lo sepan, les cuento. Desde el uno de marzo, a las dos de la tarde se hace una "mascletá" en la plaza del ayuntamiento. Yo antes iba. Hasta que un día casi me dió una lipotimia. No ven que soy de tamaño concentrado?, pues ese hecho, no es compatible con la concentración de gente que va a ver la "mascletá". Allí estaba yo, intentando respirar entre la multitud que no me dejaba espacio.
(Les comprendo, sé que están pensando, qué hacía yo en una multitud multitudinaria, sin poder respirar y sin espacio?). Es de estas cosas que yo tampoco comprendo, no se preocupen. Sobra decirles, que naturalmente, tooooodo el mundo pasaba por mi sitio y me empujaba.
"No puedo respirar y creo que voy a desmayarme, le dije al chico que por aquél entonces salía conmigo, ve y compra un agua". (Señores...no dirán que no tengo consideración, que le avisé de la inminente lipotimia). "Ahora?", me respondió. (No, el agua la voy a necesitar cuando haya perdido el conocimiento). Y no fue señores, no fue. Iba a ir yo, pero tampoco me dejaron ir, por si me perdía. (Como si yo fuese de pérdida fácil...lo complicado no era perderse, era salir de la multitud, pero bueno, yo no iba a discutir con nadie, así que me preparé para controlar mi inminente desmayo en público, que es algo tan inapropiado como vomitar en un avión).
Pero no me desmayé, no. Ahí estaba mi gran primo M, cogiéndome en brazos, sacándome a respirar y dejándome en el suelo de nuevo...que bonito eh?...ya lo sé...
Tengo que decirles que las "mascletás" me gustan.
Otra cosa que le sucede a la ciudad, en constante cambio, porque son fallas, es que cortan el tráfico. Pero todo. Y por dónde voy a trabajar?, se dicen las personas...aaaaaaaah....tú sabrás, son fallas...
Lo natural sería no ir a trabajar, todos lo sabemos. Pero no es así...a lo que iba...les decía, que el tráfico se corta, porque hay que plantar las fallas. Si uno no puede ir a trabajar, que vaya andando. "Es que trabajo donde cristo perdió la zapatilla y era tan lejos que ni fue a por ella y ya dijo, pues voy a El Corte Inglés y me compro unas nuevas"...(hombre...el triangulito existe de toda la vida a ver que se creen...)...aaaaah...pues andando, no hay otro modo.
Hace unos años, trabajaba en un comercio céntrico. Donde, por cierto, conocí a E. Estaba en una calle tan céntrica que, por supuesto, la única manera de llegar, era a pie. Pero claro, además de los problemas habituales de llegada al trabajo, se da el hecho de que hay dos días en que se hace una ofrenda a la patrona de la ciudad. Y si creían que el tráfico antes se cortaba sin más, prueben a volver a su residencia, andando claro, un día de ofrenda. No se puede. Y una que quiere llegar a su casa, no puede. Pero llega. Porque basta que a uno le digan, no puedes llegar al otro lado de la calle, para que se convierta en Dorothy, la niña del Mago de Oz y lo más vital sea llegar a casa...(vamooos Totó, adiós hombre de hojalata)...
Pero no se crean que para la que escribe todo son inconvenientes, que hay cosas buenas. Como comer paella de noche. Sí. Una va a cualquier falla y siempre hay una noche en la que se hacen paellas. Fuera de fallas nadie suele comer paella por la noche, pero en fallas, sí. Y además uno, que nunca hace nada, ese día ¡quiere ayudar!. Y se pone ahí, alrededor del fuego y la paella. Qué hago?, qué hago?. (Pues molestar, eso es lo que haces). Porque el arroz no lo hace uno, lo hacen todos.
Yo no señores, están locos?, con el humo que se genera...Señores, que son fallas y es fiesta, pero las cosas no cambian...
Después hay que ir a ver las fallas. Yo tengo una amiga que se hace un plano mental para poder verlas todas. Y nos anima como el de 300...(vale, no grita tanto, es cierto)...
Las fallas no se ven. Se observan desde la distancia, porque hay una barrera que te impide acercarte. Así que sólo te queda sumarte a la multitud y dejarte llevar por la marea humana. Entonces escuchas a alguien cercano que dice, "...has visto qué gracia tiene el cartelito ese que lleva el muñequito aquél?"...entonces una COMPRENDE. Detrás tiene a Daniel Craig que se ha traído a las fallas las gafas con rayos x. Tras esta sorprendente revelación, una se acerca, más todavía, a su amiga y le comenta por lo bajo, "tenemos detrás a Daniel Craig". Y entonces se lía. Porque como estamos todos hechos una piña, el comentario también lo ha oído la señora de delante, que para en seco. Ella no sabe quién es Daniel, pero se lo aclara nuestra amiga cuando rápidamente y con ojos como platos dice, "que ha venido 007?", y la señora, "el que hace de James Bond?"...(por el amor de Dior...hay otro 007 que no sea James Bond?)...entonces una mira a la señora muy quieta, así sin decir nada, para que la mujer tenga su momento de expansión, (a ver si así nos hace sitio) y después, antes de que entre en pánico temporal y tire por los aires a toda la cola, le explica que no, que ha sido una manera de hablar.
Y luego están los buñuelos. Ay. Ay, ay, ay.
Y ustedes dirán, qué bien verdad?, pues no.
Lo sé. Soy una mala ciudadana. Pero si no me quejo yo, quién lo hará?.
No me juzguen, cortan las calles, los niños de muchos años tiran petardos de madrugada y los de pocos por el día. Total, que es una sucesión de petardos a todas horas. (De los que hacen ruído, digo...(eeeeeeeeh...)...o sea, de los que explotan)...
No señores, no. Llegados a cierto día, uno se cansa de escuchar petardos, (del tipo que sean), a todas horas.Y sí, efectivamente, mi capacidad de aguante es directamente proporcional a...( )...vale, para esto no tengo capacidad de aguante. A lo mejor es que me estoy haciendo mayor...( )...bueno, no, seguramente será otra cosa.
Para los que no lo sepan, les cuento. Desde el uno de marzo, a las dos de la tarde se hace una "mascletá" en la plaza del ayuntamiento. Yo antes iba. Hasta que un día casi me dió una lipotimia. No ven que soy de tamaño concentrado?, pues ese hecho, no es compatible con la concentración de gente que va a ver la "mascletá". Allí estaba yo, intentando respirar entre la multitud que no me dejaba espacio.
(Les comprendo, sé que están pensando, qué hacía yo en una multitud multitudinaria, sin poder respirar y sin espacio?). Es de estas cosas que yo tampoco comprendo, no se preocupen. Sobra decirles, que naturalmente, tooooodo el mundo pasaba por mi sitio y me empujaba.
"No puedo respirar y creo que voy a desmayarme, le dije al chico que por aquél entonces salía conmigo, ve y compra un agua". (Señores...no dirán que no tengo consideración, que le avisé de la inminente lipotimia). "Ahora?", me respondió. (No, el agua la voy a necesitar cuando haya perdido el conocimiento). Y no fue señores, no fue. Iba a ir yo, pero tampoco me dejaron ir, por si me perdía. (Como si yo fuese de pérdida fácil...lo complicado no era perderse, era salir de la multitud, pero bueno, yo no iba a discutir con nadie, así que me preparé para controlar mi inminente desmayo en público, que es algo tan inapropiado como vomitar en un avión).
Pero no me desmayé, no. Ahí estaba mi gran primo M, cogiéndome en brazos, sacándome a respirar y dejándome en el suelo de nuevo...que bonito eh?...ya lo sé...
Tengo que decirles que las "mascletás" me gustan.
Otra cosa que le sucede a la ciudad, en constante cambio, porque son fallas, es que cortan el tráfico. Pero todo. Y por dónde voy a trabajar?, se dicen las personas...aaaaaaaah....tú sabrás, son fallas...
Lo natural sería no ir a trabajar, todos lo sabemos. Pero no es así...a lo que iba...les decía, que el tráfico se corta, porque hay que plantar las fallas. Si uno no puede ir a trabajar, que vaya andando. "Es que trabajo donde cristo perdió la zapatilla y era tan lejos que ni fue a por ella y ya dijo, pues voy a El Corte Inglés y me compro unas nuevas"...(hombre...el triangulito existe de toda la vida a ver que se creen...)...aaaaah...pues andando, no hay otro modo.
Hace unos años, trabajaba en un comercio céntrico. Donde, por cierto, conocí a E. Estaba en una calle tan céntrica que, por supuesto, la única manera de llegar, era a pie. Pero claro, además de los problemas habituales de llegada al trabajo, se da el hecho de que hay dos días en que se hace una ofrenda a la patrona de la ciudad. Y si creían que el tráfico antes se cortaba sin más, prueben a volver a su residencia, andando claro, un día de ofrenda. No se puede. Y una que quiere llegar a su casa, no puede. Pero llega. Porque basta que a uno le digan, no puedes llegar al otro lado de la calle, para que se convierta en Dorothy, la niña del Mago de Oz y lo más vital sea llegar a casa...(vamooos Totó, adiós hombre de hojalata)...
Pero no se crean que para la que escribe todo son inconvenientes, que hay cosas buenas. Como comer paella de noche. Sí. Una va a cualquier falla y siempre hay una noche en la que se hacen paellas. Fuera de fallas nadie suele comer paella por la noche, pero en fallas, sí. Y además uno, que nunca hace nada, ese día ¡quiere ayudar!. Y se pone ahí, alrededor del fuego y la paella. Qué hago?, qué hago?. (Pues molestar, eso es lo que haces). Porque el arroz no lo hace uno, lo hacen todos.
Yo no señores, están locos?, con el humo que se genera...Señores, que son fallas y es fiesta, pero las cosas no cambian...
Después hay que ir a ver las fallas. Yo tengo una amiga que se hace un plano mental para poder verlas todas. Y nos anima como el de 300...(vale, no grita tanto, es cierto)...
Las fallas no se ven. Se observan desde la distancia, porque hay una barrera que te impide acercarte. Así que sólo te queda sumarte a la multitud y dejarte llevar por la marea humana. Entonces escuchas a alguien cercano que dice, "...has visto qué gracia tiene el cartelito ese que lleva el muñequito aquél?"...entonces una COMPRENDE. Detrás tiene a Daniel Craig que se ha traído a las fallas las gafas con rayos x. Tras esta sorprendente revelación, una se acerca, más todavía, a su amiga y le comenta por lo bajo, "tenemos detrás a Daniel Craig". Y entonces se lía. Porque como estamos todos hechos una piña, el comentario también lo ha oído la señora de delante, que para en seco. Ella no sabe quién es Daniel, pero se lo aclara nuestra amiga cuando rápidamente y con ojos como platos dice, "que ha venido 007?", y la señora, "el que hace de James Bond?"...(por el amor de Dior...hay otro 007 que no sea James Bond?)...entonces una mira a la señora muy quieta, así sin decir nada, para que la mujer tenga su momento de expansión, (a ver si así nos hace sitio) y después, antes de que entre en pánico temporal y tire por los aires a toda la cola, le explica que no, que ha sido una manera de hablar.
Y luego están los buñuelos. Ay. Ay, ay, ay.
Miren que yo no soy fan, fan de comer, (bueno, menos si hay helado, que ya no conozco ni el nombre de mi madre), pero los buñuelos...ayayayay...señores, los buñuelos son algo que hay que probar. Y ya que estamos, permítanme que les recomiende los de la Plaza del Collado. Buñuelos y un chocolate caliente y luego a seguir viendo fallas...a ver si encontramos otro Daniel...jejejeje...
(07.03.13)
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