martes, 24 de septiembre de 2013

Eros en concierto...

  
   Señores!!!, me llena de orgullo y satisfacción contarles que estuve el sábado en el concierto de Eros en Madrid. Qué emoción señores...qué emoción...
Yo es que soy fan, fan, fan, desde pequeña. Sí. Era fan de póster. Y quería ir a verlo a Roma y todo...(ahora también...sólo que ahora es más "fácil" que cuando tenía doce años)...
"Ay cari, que ganas tengo de que sea el concierto, le decía a E, cuando lo vea voy a llorar de la emoción, ya verás..."...(Tengo una regla, bueno varias, pero una de ellas es que no lloro en público).
No obstante, si me lo permiten, antes de contarles cómo me fue en el concierto, me gustaría contarles alguna anécdota del viaje... :) .
No. En este concierto no metí el pie en el hueco del ascensor ni casi me mato por no ver el último escalón, como en Il Divo. Sí que perdí el equilibrio por mirar donde no debía, pero bueno...
   Cuando una a de ir a un concierto, y no es en su ciudad, se le plantean ciertas tareas.
La primera es la de comprar avituallamiento.
Es decir, coca cola, coca cola zero...(que no es como la normal), red bull, papas variadas, agua...y ya. Porque D está a régimen y Mj y yo hacemos como que no comemos porquerías varias...(hacemos, porque luego yo iba a hablar y era como triki pero sin galletas)...perdón, no. Y un bocadillo. El bocadillo es muy importante, porque con la excusa del, "por si no comes nada más", te hacen un bocadillo que te dura todo el viaje.
La otra tarea es coger un bolso muy grande, porque como vamos a estar todo el día fuera y luego está el concierto...claro...hay que llevarse de todo.
No, no, señores, yo les explico rápidamente el concepto "de todo". Cepillo de dientes, cepillo del pelo, toallitas, desodorante, crema hidratante, crema para el sol para el viaje, gafas de sol, maquillaje opcional, rimel, cacao para los labios, lentillas, colirio...creo que ya...no,no, perfume.
Y después, hay que pensar qué vamos a ponernos para el concierto, porque obviamente, la ropa del viaje es una y la del concierto otra.
Yo tenía que ir arreglada. Pero no demasiado. Y además tenía que llevar unas zapatillas en particular hacia las que tengo un vínculo especial.


   Una vez llegamos a Madrid, dejamos el coche y nos fuimos a hacer tiempo y tomar algo. Algo así como una merienda-cena.
Después de dar mil vueltas llegamos a un bar. Un bar en el que no hacían bocadillos señores. Miren que Madrid es grande, pues no... "Aquí no hacemos bocadillos", nos dijo el hombre. Y todos así... ÖÖö . Todos menos yo, señores, porque ya saben que yo a estos contratiempos estoy más habituada porque todo me pasa a mí.
Bueno, pues vamos a un horno. TAMPOCO.
Fuimos a caer al único horno que sólo hacía empanadillas de atún. Y además no tenían nada que me apeteciese comer. Y ya que tengo que comer sin ganas, por lo menos que sea algo atractivo.
Al final saben dónde fuimos?, al bar que está enfrente del palacio de los deportes... Sí. Yo también me pregunto porqué no fuimos a la primera, pero es de estas cosas que no ves...hasta que se te empieza a acabar el tiempo...
(Que les tengo que decir una cosa, para todo lo que tenía que hacer, yo estaba muy tranquila).
   Nos terminamos el bocadillo, "tú has de comer que luego no vas a comer nada en el concierto", ven como me cuidan señores?...aaaaay..., la coca cola inmensa y a la cola del aseo. Que llegaba hasta la puerta del bar. (También tengo que decirles que a mí no me impresionó. He visto colas más largas.).
(Colas para ir al aseo, digo.).
Y qué pasa cuando hay una cola para ir al aseo de mujeres y además está el componente de que hay posteriormente un concierto?...que no avanza. No avanza. (Tienen razón, de normal TAMPOCO avanza, no es necesario que haya un concierto). Y una pensando, yo me pondría las lentillas aqui, pero es que primero quiero lavarme los dientes, la cara, ponerme la crema hidratante...dónde está El Corte Inglés?...triangulito salvador de estos problemas y otros tantos...
   Y entonces pasó señores. A tres personas de que me tocase entrar, Mj se levantó y dijo, "esto lo arreglo yo. Vamos al aseo de hombres que no hay cola".
No quieran ver mi cara.
Y yo, "no".
Señores, no.
Y ella que sí, que allí no había cola. (Y ciertamente no la había). Pero no. Que yo no puedo señores, que no. Que yo no puedo hacer pis en el aseo de caballeros. Que no.
"D, tu vigíla la puerta. Entras?". Y me vi presionada señores. Todas las mujeres de la fila me miraban. Así que entré.
Y verán que a D únicamente se le pidió que vigilara la puerta. Pues señoreees!!!, entró un chico y yo con mi crema hidratante. Y el pobre aún me pidió disculpas...que encanto...
Así que, al ir al coche a cambiarnos tuve que volver al aseo, porque yo no había terminado con todo lo que tenía que hacer.
No. Señores yo bajo presión no puedo. Y yo sentía también, la presión del pobre chico que salió de inmediato a verificar que había entrado al aseo correcto y que era yo la que estaba equivocada.
   Una vez terminado todo eso...a la cola...


...y de la cola...a nuestro sitio...

...creo que no se podía tener más cara de emoción y felicidad...
   Describirles el concierto sin sonreír recordándolo es imposible. Puedo decirles que he ido a muchos, pero ninguno como ese. Ninguno me ha causado tanta emoción, tanto brillo en los ojos, tantas ganas de salir corriendo a ponerme en primera fila y gritar, cantando las canciones...Tal vez porque tenía ese "algo" especial de seguirlo desde niña, tal vez por otros sentimientos varios....pero sólo necesite una canción señores. La primera. A las primeras palabras cantadas en italiano, se me llenaron los ojos de lágrimas por la emoción y rompiendo mi regla, no pude aguantarme y me puse a llorar.
Cuántas emociones habían en esas lágrimas...
Fueron dos horas de concierto sin descanso, en las que cantó mucho más en italiano que en español, para beneplácito propio, y en las que no paré de cantar, más en italiano que en español, gritando hasta el mareo, a pesar de estar en el sector más aburrido del mundo y tener a mi lado a un chico más almidonado que la camisa que llevaba puesta, y disfrutando de algo que para mí era más que un concierto...volviendo a no poder sujetar las lágrimas, cuando cantó una canción del pasado...un pasado en el que podía recordarme sentada en el suelo con doce años y ese primer disco suyo que me regalaron en la mano, escuchando esa misma canción salir de mi tocadiscos.
Con unos músicos excelentes, un escenario muy arquitectónico y una gran complicidad con el público, el concierto se hizo corto, muy corto.
Gritos incontenibles cuando sonaron los primero acordes de "Un ángel como el sol tú eres"...(aaaiiinnnsss)...,un brillo especial cuando cantó "Estrella gemela", unas ganas enormes de salir corriendo a saltar y bailar con "Sotto lo stesso cielo" y "Fino all'estasi"...y tantas y tantas otras canciones que sólo él sabe cantar acariciando el cuore...
   Y tras esa última canción, con las emociones a flor de piel, de nuevo al coche para volver a casa, contando a mis amigos por whatsapp, que me hicieron compañia a la vuelta, lo maravilloso de ver a mi Eros en concierto.
Y a mi lado yo misma con doce años y aquella misma cara de emoción..."...yo quiero ir a verlo a Roma..."...parecían decir sus ojos...
...Algún día...
  


Foto:
Noi tour Eros Ramazzotti

(24.09.13)

2 comentarios:

  1. ¡Bravo R! Has conseguido volver a llevarme contigo :')
    ...y eso que a mi Eros ni fú ni fá pero "lo que é, é"

    Me hubiese gustado ver esa cola (la del baño digo, claro) jajajaja

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    Respuestas
    1. M!!!!!
      Me alegro de que te haya gustado..., la verdad es que fue muy emocionante en muchos sentidos...ójala un día pueda verlo en Italia...
      Y la cola...pues bueno....no era para tanto...jaajaja...en otras ocasiones he esperado más...jajajaja

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