Me he perdido...

   Señores, me he perdido.
Pero no me refiero a perder la cabeza o cosas así...ya saben que para eso ya no hay remedio. Me he perdido en la calle. Bueno, técnicamente no es que...vale sí.
Es que tengo tendencia a perderme. A eso y a los zapatos y bolsos caros.
   Y ustedes dirán, y si tiene esa "tendencia" a la pérdida...porqué no se compra un gps?.
Está bien, se lo diré. Tengo un gps. Pero también se pierde. Por lo tanto, si se pierde él...cómo no voy a hacerlo yo?...

Se dan cuenta no?, no soy yo, son circunstancias externas a mi.
   Verán, es que he ido a una entrevista de trabajo. Y llegar, he llegado. Pero luego no sabía volver. Es evidente que las calles las hacen mal. También las entradas a los parking, no se crean, porque díganme ustedes, porqué se llega antes a la salida que a la entrada?, pues ha sucedido. He tenido que entrar por la salida. Iba en moto eh?, no crean que soy de esa clase de personas que va en contra dirección en coche. NO. Eso sí que no.
Tras acabar, me dirijo a la salida, donde habían dos direcciones, una llevaba a una calle que "me sonaba" y al centro, la otra, llevaba a una calle que conozco "de oídas" y también al centro. (Es que se puede ir al centro en las dos direcciones?....qué raro, he pensado yo). Así que he ido por la que me sonaba. Y no. Porque he llegado a unas calles que no conocía y al final, he aparecido en el parking del que he salido. Entonces haré el mismo camino que he hecho al venir...pero al contrario. Tampoco.

Afortunadamente, llegados a un punto, la inspiración divina me ha hecho seguir en la dirección correcta y no me he perdido...demasiado.

   Esto es algo habitual en mi, saben?. Voy a los sitios y normalmente, no sé llegar o me pierdo.

Hace un tiempo, quedé con un amigo, estaba muy orgullosa de mi misma, porque había encontrado la calle donde habíamos quedado a la primera, llegué, aparqué mi preciosa moto y me dirigí al patio en particular...que no estaba donde había aparcado.

Bueno, no pasa nada, me dije, no conozco la calle, y no sé a qué altura queda...cojo la moto, voy a la otra parte,(en contra dirección) y ya está. Pero al llegar a la otra parte de la calle...tampoco estaba el patio!!!.

A esas alturas ya le había escrito al pobre, preguntándole dónde se encontraba...porque yo estaba allí!!!...(a lo mejor el patio también se había perdido...o él...).

Y saben ustedes qué hizo?, me mandó un mapa con su localización.

(Entre ustedes y yo, el mensaje me pareció muy gracioso, pero no sé leer mapas. Así que empecé a darle vueltas a la bb, mientras pensaba..., y esto cómo lo miro?, intentando saber dónde se encontraba él, para poder situarme yo...(efectivamente, todo menos llamar y decirle, no sé leer mapas...me he perdido).

En fin...estaba claro...el patio estaba jugando al escondite...

   La última fue el sábado. Íbamos a una fiesta en casa de mi amiga P. Y claro, yo no sé llegar. Que digo yo una cosa, porqué para facilitarme la vida, no vive en el centro?.

"El centro"...un concepto taaan ambiguo...(ambiguo para los demás, yo tengo clarísimo en qué calle está el centro en mi ciudad...porque tengo la verdad absoluta en cuanto a eso y los demás...pues no). El centro de mi ciudad se encuentra donde está El Corte Inglés...del centro, (por eso se llama así)  y las calles de alrededor. Todo lo demás, está "por" el centro o "cerca" del centro. Esto es así.

El caso es que ella vive en un pueblo de las afueras, y mi amiga S, intentó explicarme por teléfono cómo llegar. Mientras ella me lo explicaba, yo visualizaba, (tipo mapa en movimiento), el camino...hasta que llegamos a un punto en que ella se empezó a trabar...y yo a dejar de escuchar...

A ver...no es que yo estuviese no escuchando, es que si ella misma se lía...cómo no voy a hacerlo yo?, efectivamente, nos perdimos en la explicación.

   Así que pasó lo que tenía que pasar...que A, Jc y C vinieron a por mi...(ay...es que tengo unos amigos...).

Voy a prestar atención, me dije, y así para la próxima vez, sabré llegar. Y lo estaba haciendo eh?...estaba interiorizando el camino, entonces A se giró para enseñarme un vídeo de su móvil y otro, y otro...y ya no pude seguir amigos. Prestar atención al móvil, la conversación  y el camino...era más de lo que podía soportar a esas horas de la noche...

   Y el pobre de Jc..., "Ya ha empezado a tocar los platillos el mono?"...

   "Eeeeeh?"...

Yo creo que eso contestaba a su pregunta...

   En fin...como ven, el mundo entero se pone en mi contra a la hora de organizar sus calles y sus caminos...

Menos mal que mis amigos siempre me encuentran, cuando estoy perdida...

Ilustraciones, Jordi Labanda.

(29.10.12)

007...licencia para...todo.

   En el año de su 50 aniversario, la próxima semana se estrena una nueva película de James Bond. Skyfall.
   Varios han sido los caballeros que han interpretado a este irresistible hombre, preparado para la vida moderna, y perfectamente vestido y peinado, rodeado de ese halo de misterio y sensualidad. Míticas son sus frases, "Me llamo Bond...James Bond", y cómo no el "mezclado, no agitado", al pedir su martini con vodka.
   Mi preferido es Connery.

Connery es de estos señores que de joven encantaba y ahora de mayor dices, yo quiero envejecer como él...y con él.
   Así que ya lo he decidido, yo quiero ser chica Bond y luchar contra los malos. Sí, ya sé que no tengo el físico de Halle Berry... y el largo etcétera de mujeres impresionantes que han compartido cartel con los 007...pero ya lo conseguiré, eso es lo de menos...
Quiero ir, en un abrir y cerrar de ojos a cualquier parte del mundo, estar rodeada de glamour, de martinis, de playas paradisiacas, salir del agua, quitarme el traje de neopreno, aparecer con uno de alta costura y acabar con el malo. Ay, eso sí que me hace ilusión...aunque estoy en contra de las armas, aquí haría una excepción, así que yo también quiero una Walther ppks y empezar a dar patadas, (porque una también está preparada para eso), y acabar con todo aquél que se ponga por delante...(con los malos, menos malos, claro, que del "malo de verdad" ya se encarga James). 
   Y también quiero que me rescate. Sí, es mi fantasía y quiero que el malo me coja, (pero no hace falta que me torture eh?, tranquilito, de hecho, si de pelear a lo Lara Croft se me ha estropeado el vestido, como es un caballero, porque es malo, pero educado, deberá proporcionarme otro de alta costura), y que venga 007 y me rescate.
Además, es que me hace mucha ilusión que "Q" (el de Skyfall a ser posible), me deje tener "aparatitos tecnológicos" en un maletín, bueno, en este caso sería un bolso. Se imaginan cómo sería?...

"Aquí tienes tu nuevo "Birkin", está equipado con las últimas tecnologías. Este gloss, no es sólo eso, si lo giras al revés, emite un gas que te permitirá aturdir a quien sea. El candando del bolso lleva incorporada una mini bomba, esta pluma estilográfica es un láser,

tu nuevo reloj, (en distintos colores para que puedas combinarlo), sirve para hacer fotos, tu nuevo teléfono tiene un ordenador como el de la nasa y el bolso lleva un localizador para que sepamos en todo momento dónde te encuentras".
Se dan cuenta de lo listo que es "Q"?...aaaaay...

Además, quiero una moto y para cuando llueva un Aston Martin blindado y con asiento eyector, así cuando no me interese la compañía...fuera!!!

     Oigan...que prácticamente tengo que medio salvar al mundo...tendré que ir bien vestida y bien equipada...
   Y entonces llegó él, Craig...Daniel Craig.
Con su aspecto de hombre torturado por la vida y al que inmediatamente queremos "salvar" de su propia desgracia, abocado al trabajo, porque no le queda otra opción...un trabajo que odia, pero sin el que no puede vivir.
Así que después de volver a ver Casino Royale y tras observar detenidamente el trailer de Skyfall, he decidido que quiero ser chica Bond en una de sus pelis y que Daniel, convertido en 007, me rescate.
Ya nos imagino, a toda velocidad, él tan normal, así como si nada, conduciendo y mirando que el enemigo no nos persiga. Yo, evitando mirarle a esos ojos color azul cielo y cuando aparcase perfectamente, haciendo un trompo, claro, y me dijese con su profunda voz, "Nena, ésto es la vida real",  yo simplemente me arreglaría el pelo, despeinado ordenadamente, como sólo pasa en las películas y no le diría que no me gusta que me llamen nena, porque él tiene licencia para matar...y para todo. "Cuando todo esto termine, nos iremos lejos..tú y yo".

Entonces una,(que provisionalmente ha muerto), ya no puede más que rendirse a los encantos encantadores de Bond/ Craig/ 007 y sucumbe ante el Aston Martin, la corbata, los ojos azules...y ya se imagina en un lugar remoto, con el mundo a salvo y James/ Daniel con la barba de dos días, los ojos azules a juego con el mar...y un martini con vodka..."mezclado, no agitado".




Bolso Birkin, Hermes.
Gloss, Dior.
Reloj, Swatch.
Coche, Aston Martin.

(23.10.12)

No hay nada...

   Queridos amigos...
Vengo rendida y consternada...todo a la vez.
   Resulta que me ha llamado mi amiga Y, el sábado es su cumpleaños, y me ha pedido que la acompañe a comprarse un vestido, porque se va de cena con su novio.
A la hora de enfrentarse a una tarde de compras, existen dos formas, la primera es acudir con una cierta idea de lo que queremos. La segunda es la que me presentaba mi amiga...
"Pero vamos a quedar pronto nena, que como no sé lo que quiero..."...
Analicemos la frase, lo primero, tengo que decirles que no me gusta que me llamen nena, pero a ella y a Mi se lo consiento..., bien, sigamos, que una vaya de compras, "sin saber lo que quiere" no es una buena idea, porque vas de tienda en tienda, como pollo sin cabeza y sin encontrar nada.
"ÖÖÖ...entonces iré no arreglada, iré así...estilo cochambre", "ah sí?, cochambre?, ja,ja,ja, bien, porque nunca te he visto así.".
Tres horas después, señoras y señores, nada. No había nada.
   Quedamos a primera hora de la tarde...y fuimos a la primera tienda.
Con un simple vistazo, nos dimos cuenta de que allí, nada iba a ser útil. (Ya saben a lo que me refiero señoras, esto es así, una entra, mira alrededor y dice, no.) Aún así, subimos al otro piso de la ruidosa tienda...(donde tampoco había nada...que ella quisiera).
Siguiente parada, una tienda pequeña y llena de gente, (que yo no digo nada, porque no quiero parecer Sheldon Cooper, pero porqué la gente se empeña en esperar a que entre, para empujarme sólo a mi? y porqué los expositores de complementos no giran?), llena de ropa...pero vacía.

Decidimos dar un paseo hasta la siguiente, outlet de la primera..."aaah que zapatos tan monos", "nena, que no hemos venido a ver zapatos"...(yo no voy a ver zapatos señores, los zapatos me llaman y tengo que acudir, es como el escaparate de LV, donde está mi pequeño gran bolso, y cuando paso por la puerta de la tienda, me saluda y me habla), ni zapatos, ni bolsos, ni vestidos ni nada...otra tienda en la que, perchas llenas de ropa, a nuestros ojos estaban vacías...bueno, eso no es del todo cierto, había un bolso encantador y no útil monísimo. Ay, qué quieren?, es mi naturaleza, no lo puedo evitar...

   "Vamos allí". "Te das cuenta de que nos estamos recorriendo todo el grupo Inditex, no?" (Todo menos una de sus franquicias)...Y digo yo una cosa, si no encontraba ningún vestido...porqué no se ponía uno de los suyos?...o porqué no iba en vaqueros?...

Y mientras caminábamos hacia nuestro siguiente destino..."yo me fío de ti, nena, tú llévame donde a ti te guste", "a Dutti?", "jaaa...por favor...".  
   Ustedes ven?, una quiere ayudar y no la dejan...si es que estoy vendida...
   Sin más, nos fuimos al almacén del triangulito...a ver a Mi, a lo mejor allí teníamos más suerte...
Y allí estaba ella...
"Nenaaaaas...pero mira que monas...vais de compras?, uuuuuh...si os habéis cambiado los papeles, tú vas toda arregladita y R va como de rara. Pero vas mona eh?".
(Esa es nuestra Mi...).
Señoras y señores, yo no voy vestida de rara, eso que lo sepan ya...bueno...qué les voy a decir?...ustedes eso YA LO SABEN.
   Después de la visita infructuosa al almacén del triangulito,(a los dos), y recorrer todas las tiendas de una conocida calle, nos rendimos y nos fuimos a tomar un café.

Como no pudimos arreglar su vestuario, decidimos arreglar el mundo...(el nuestro).
   "Pues nada nena, mañana volveré".
Y digo yo una cosa, qué esperaba encontrar al día siguiente?, si no había nada, si habíamos ido a todas las tiendas(menos Dutti y la que trabaja Mi...("si hombre, con lo cara que es la ropa aquí, quieres que mire algo?")...si he entrado a tiendas en las que no había entrado en mi vida...ÖÖÖ...
Que yo no digo nada, pero yo me habría rendido hace tiempo...lo que pasa es que como soy tan buena amiga, la acompaño a esos sitios de música altísima y empujones constantes hacia mi persona, y donde la ropa no está ordenada por colores, donde como todas sabemos...nunca hay nada.
   Tras dos días de éxito nulo, al final pasó lo que tenía que pasar...que ha decido ponerse un vestido suyo.
Y en un mensaje me pregunta... "Pero el verde o el otro?".
   Aaaaaaaaiiiiinnnsssss.... :D


(18.10.12)

Dos

   A ti...
"...Sólo puedo pensar en ti, mi amor inmortal,
sólo puedo vivir del todo contigo o de ningún modo.
Tranquila mi vida, mi amor, sólo pensando en nuestra existencia
conseguiremos nuestro objetivo, que es vivir juntos.
Sigue oooh amándome, nunca juzgues mal el corazón de tu fiel enamorado.
Siempre tuyo, siempre mía,
siempre nuestros."

   A te...
"...I miei pensieri sono rivolti a te, mia amata immortale,
posso vivere soltanto unito a te, non altrimenti.
Sii calma, mia vita, mio tutto,
solo contemplando con serenità la nostra esistenza,
potremmo raggiungere il nostro scopo di vivere insieme.
Continua ad amarmi, non smentire mai il cuore fedelissimo
del tuo amato.
Eternamente tuo, eternamente mia,
eternamente nostri."

Ayer, hoy, mañana, siempre...
Ieri, oggi, domani, sempre...


(11.10.12)

Te acuerdas...?

   Típico es, que en cualquier reunión familiar o de amigos, surja la clásica..."Te acuerdas...?"...acompañada de la consiguiente, "batallita".
Eso fue justo lo que me ocurrió, hace unos cuantos días. Se hablaba en la conversación, de los parques de atracciones y llegó el momento antes citado...
   "Te acuerdas cuando fuimos a Benidorm, y subimos..."...
   Y mientras en mi cabeza....un flash-back me llevó a ese día...
   Sí, claro que recuerdo la vez que fuimos a Benidorm y subí a la montaña rusa...de madera...(la estructura "de cara al público", claro, no crean que es que estábamos en una película de Regreso al futuro y volvíamos atrás en el tiempo)... Cómo voy a olvidarlo?... En cada curva, en cada sacudida, paaaaam, contra el asiento...no, no lo he podido olvidar y mi espalda tampoco.
Pero claro, como imaginarán, esa no es la historia...nooo.
   En una situación normal, uno llega, hace la cola, (mientras va mirando la atracción, algunos, los más cagoncetes, (sí, he dicho cagoncetes), nos planteamos qué hacemos ahí), toma asiento, cierra la barrera de seguridad y ya está.
   Pero yo no soy como los demás, yo llego, hago la cola, (mientras, voy mirando la atracción y me replanteo seriamente qué hago ahí), tomo asiento, cierro la barrera de seguridad, (compruebo que está bien cerrada...varias veces), alargo los brazos para cogerme...y no llego al asidero.
Entonces miras al de tu lado. Vuelves a alargar los brazos, (por si en ese intervalo de tiempo te han crecido), y no, no llegas. Por si no se ha dado cuenta, se lo dices.
"No llego. No llego. (Entonces una ya se imagina lo que va a pasar. No, es mentira...una SABE lo que va a pasar.). Está claro, me voy a matar, como voy a salir volando porque no puedo cogermeee". "Sólo tienes que acercarte".
Y claro, como tuve que acercarme, me quedé en mitad del asiento, así que en cada movimiento, me golpeaba, en cada subida y su consiguiente bajada ahí estaba yo, golpeándome...

Pero la cosa no terminó ahí...
   Después de la montaña rusa de madera, fuimos a otra atracción. Una en que se cae desde 54 metros de altura. Nuevamente me encontraba en la cola, (buscando la salida), replanteandome muy seriamente porqué había decidido hacer caso a mis amigos y subir a la atracción.
"Será divertido", decían, "si no pasa nada, qué son esos metros?"...
   Así que una se hace la valiente y se sube, se sienta en su sitio y mueve los pies, que le quedan colgando...(antes no llegaba al asidero, ahora me cuelgan los pies...en fin...)...y entonces empiezan las risas nerviosas cuando bajan el arnés de seguridad, alias, "sujetador de personas para que no salgan volando". 
El chico encargado de la atracción hace una comprobación del arnés, (yo también, que no es que no me fíe del chico, ustedes ya lo saben, pero me fío más de mí), y no pude evitar un..."a mi ciérramelo bien eh?", "no, a ti te lo voy a dejar suelto ;-) ".  ÖÖÖ PERDONA???, inmediata mirada al lado y a sotto voce..."D!!!tú que eres más fuerte que yo, comprueba que está bien cerrado". "Está bien cerrado...". "Mmmm, seguro?, muévelo a ver."
Entonces vas subiendo los 54 metros, click, click, click...aaah, mira que vistas de Benidorm, qué bonito todo, que alto estoy subiendo, no pasa nada, no pasa nada, todo es bonito, la vista es bonita, el mar y..."pero tú no tenías vértigo?"...(sonido de disco rayado)..."Aaah, quiero bajar, quiero bajar"...(efectivamente, porque hasta ESE momento, una no se acordaba del vértigo).
Entonces se oyó un clik y bajamos...bajé tan rápido que no podía ni oír mis gritos. Hasta que la atracción frena en seco y te oyes gritar, entonces te callas, porque estás gritando... :P.

  
Eso sí...cuando sales de ahí estás de lo más relajado...
Mis amigos subieron dos o tres veces más, yo con una tuve suficiente...
   Unas risas me devuelven a la realidad, mientras en la mesa, se sigue oyendo...
"...a la montaña rusa de madera y no llegabas a cogerte?...jajaja".



(09.10.12)